Los 7 puntos para no dar hueva en una plática

0
2530
Nada peor que una plática de hueva

No importa la edad, lugar o sexo, estar en una conversación aburrida jode cualquier reunión, no solamente las citas románticas, sino toda fiesta o encuentro social.

No juzgo, pero si estás leyendo esto supondré que el primo de un amigo ha tenido problemas para mantener una conversación interesante, no te preocupes, te guardo el secreto. Pues bien, aquí van unos puntos importantes:

1. Cultívate.

Por lo menos un poquito. No seas huevón y lee, actualízate, viaja, aprende y descubre. Así tendrás más temas de conversación y será más interesante conversar contigo, o por lo menos podrás entender las referencias de los demás.

2. Escucha.

Pon atención a la plática. Por ejemplo atiende al nombre de la otra persona, de vez en cuando repíteselo, para que sepa que realmente le pones atención y te interesa la conversación, además nos encanta que nos digan nuestro nombre.

 

 

3. No seas ‘ligador’, por favor.

Puedes sentirte el irresistible macho alfa de la jauría, pero cuidado porque por más galán que seas, si cada conversación la conviertes en «ligue» y tienes tu actitud de «soy lo que estabas esperando» caerás en ser un ridículo, gastado y divertido cliché.

Y aunque sí estés de «ligador» deja esa actitud de lado, de verdad es muy jodida. Bueno, no lo niego, eventualmente puedes encontrar a quien caiga con eso. Ni hablar «moretón pa’l chingadazo», dirían en mi pueblo.

4. Mira a los ojos. 

OJOS, DIJE. El lenguaje físico habla mucho más que las palabras, así que mira a los ojos para que físicamente se note el interés en la conversación. Evita distraerte con lo que hay detrás, si hay un partido en la TV, si llegó alguien y por favor, POR FAVOR: no te quedes viéndole el escote.

5. ¡Deja el celular!

Además de mirar a los ojos para demostrar que estás poniendo atención, evita estar viendo cada 5 segundos el teléfono. Esto también aplica con el reloj y otras distracciones, si quieres estar en otro lugar, mejor vete a ese cabrón lugar.

6. Permite que hable

Es una conversación, no un monólogo, así que permite a la otra persona hablar. Pero ponle atención, recuerda el punto anterior.

7. Relájate

Si estás tenso se te notará en el cuerpo, olvidarás cosas, no pondrás atención y podrás cometer varias estupideces. Así que deja que todo fluya, sé como eres, acepta si no sabes algo, habla normal, modula la velocidad y el volumen de tu voz. La gente te hará caso por lo interesante de tu conversación, no porque grites.

Habrá muchos consejos más de «gurús de la comunicación» o no sé qué tantos «expertos» puedan existir, pero olvida todo lo que leíste, incluyendo todo esto, nadie sabrá mejor cómo desenvolverse en tu contexto específico, sólo tú.

Pues, eso es todo por ahora, ojalá le sirva al primo de un amigo o al menos te hayas divertido. ¿Agregarías algún punto, has sido testigos de esta situación?

 

¡Deja tu comentario!